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Joel es un niño de 5 años que vive en Madrid junto a sus padres y su hermana. Este pequeño disfruta jugando con sus juguetes como cualquier niño de su edad.
Sin embargo, a Joel le resulta complicado comunicarse. Aunque están trabajando mucho en mejorar esta área, creemos que la introducción de un perro de asistencia puede ser clave en su desarrollo. La dificultad para comunicarse ha llevado a Joel a no relacionarse con otros niños de su edad, y apenas con adultos.
El perro de asistencia podría proporcionar un espacio seguro y de confianza que facilite las interacciones sociales para Joel. Sabemos que los perros son un imán para entablar conversaciones y, por lo tanto, podrían ayudar en su desarrollo social.
Uno de los momentos más tensos surge cuando salen a la calle. La incertidumbre de no saber cuándo Joel podría correr sin control mantiene a sus padres en un constante estado de alerta.
Un perro de asistencia sería de gran ayuda en varios aspectos clave para Joel y su familia. Contribuiría a mejorar su comunicación, controlar la frustración reduciendo las crisis y prevenir las fugas en la calle. Además, fortalecería las interacciones sociales y de comunicación, aspectos que son de gran preocupación para la familia.
La familia de Joel está unida y decidida a mejorar la calidad de vida de su hijo. Ven en la incorporación de un miembro de cuatro patas una oportunidad para fortalecer aún más su unidad familiar y ayudar a Joel a superar cada desafío que se presente.
Consideramos que un perro de asistencia sería un recurso incalculable para esta familia que busca brindar a su hijo todas las oportunidades posibles. Este compañero de cuatro patas se convertiría en un valioso miembro del equipo, un aliado constante que acompañaría a Joel y su familia en su día a día.
ONG especializada en la ayuda a familias de niños con TEA (Trastornos del Espectro Autista). Entrenamos los Perros de Asistencia que las familias necesitan. Nuestros perros evitan que los menores crucen carreteras, los localizan en caso de que se desorienten, reducen sus crisis sensoriales y favorecen la inclusión social. Marcan la diferencia cuando las familias tienen miedo de salir a la calle porque el peque lo va a pasar mal o se va a escapar.
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Beatriz
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Beatriz
Desde @abelysuhuella queremos aportar un granito de arena… sabemos que no es mucho… pero os acompañamos y estamos a vuestro lado. Ánimo familia! Juntos hacemos una playa!